POCAS HORAS RESTAN.
No sería nada novedoso que en todo el país las oficinas de los registros electorales de Chile se vieran atochados de espontaneos entusiastas votantes quiene a estas horas se han decidido a inscribirse o cambiar de registro para poder cumplir con tan " dessagradable " - como dicen - obligación.
La verdad que los gastos publicitarios del gobierno, por medio de las diferentes alternativas comunicacionales, no logran atraer a la comunidad en forma masiva, para que se interesen en inscribirse durante años de plazo que tienen.
En Lautaro a diez dias del cierre el movimiento fué tradicional, no existen interesados a lo mucho son más los que se han cambiado a la comuna que los nuevos inscritos.
Hoy se espera mejorar y recuperar parte de lo que por años se ha mantenido como la línea de escasos interesados, y es posible que lleguen nuevos mayores de edad que puedan hacerlo.
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